Meditación
La meditación es una técnica milenaria que se ha practicado durante miles y miles de años y solo ahora la ciencia consigue demostrar algunos de sus beneficios. Consiste básicamente en poner foco en algo en concreto, normalmente suele ser la respiración, apagando todo tipo de estímulos de alrededor, ruidos mentales, pensamientos y conversaciones internas.
¿Cuáles son sus beneficios?
Antes de hablarte de los beneficios que la ciencia consigue demostrar, prefiero contarte mi propia experiencia personal. La meditación ha sido fundamental en mi desarrollo personal debido a 5 factores claves:
1) Me ha ayudado a tener más concentración
Siempre he sido muy despistada y con una imaginación muy profunda. Mi atención era volátil y la meditación me ha ayudado a expandir más mi capacidad de foco, encontrándome con mejores resultados a la hora de estudiar alguna materia, comenzar alguna actividad de fatiga mental o incluso de apaciguar la dispersión.
2)Me ha ayudado a superarme
Una de las cosas que me ha aportado la meditación es a superar ciertos miedos, por ejemplo, a hablar en público. Esto es debido a dos cosas. La primera, al estar más conectado contigo, aumenta tu autocomprensión. Lo segundo, al estar conectado contigo, también aumenta tu capacidad de gobierno interior, ya no vives tu vida de forma pasiva, sino que comienzas a tomar el mando de ti mismo, superando ciertos obstáculos que antes estaban delante de ti pero te “enfrentabas” a ellos de manera pasiva.
3) Me ha ayudado a tener mayor capacidad de respuesta asertiva
El mundo sucede demasiado deprisa y a veces, no respondemos de la manera más asertiva. La meditación me ha aportado el tener 5 segundos más de tiempo para responder. Esto es debido a que las respuestas provienen desde otro lugar, un lugar de mayor conexión interna y autoconocimiento.
4) Me ha ayudado a incrementar mi Autoconocimiento
La meditación consiste en acallar todo lo que te rodea, incluído tus pensamientos, dándote cuenta de un espacio muchísimo más profundo que habita dentro de ti. Darte cuenta de este espacio, de este estado de presencia, te permite conocerte de manera más profunda, desidentificándote de tus pensamientos y emociones y percibiéndote como un todo.
¿Cómo comenzar?
Hoy en día puedes encontrar todo por internet con tan solo un click. Nunca ha habido tanta información a nuestra disposición. Comparto contigo el Reto de 9 Días si quieres empezar a incorporar esta práctica ya mismo a tu vida y a expandir aún más tu consciencia:
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Si quieres hacerlo por tu propia cuenta, solo tienes que disponer de 2 cosas:
1) Un espacio tranquilo donde nadie te moleste
2) Tiempo para ti
TÉCNICA
Siéntate o túmbate de manera que estés cómodo. Si estás sentado, procura buscar una posición donde tu espalda esté lo más recta posible y tus hombros relajados. Comienza dándote cuenta de tu respiración y ve expandiendo más y más tu percepción. Cada vez que te des cuenta de que algún pensamiento invade tu mente, ponle atención a ese pensamiento, verás como poco a poco comenzará a disolverse…
Después regresa a tu respiración y mantente en ese estado, percibiendo tu respiración y expandiendo tus sentidos, durante unos 5-20 minutos. Ve dándote cuenta de cómo te sientes, del tacto de tu ropa, el tacto de la superficie donde estás apoyado. Siendo consciente poco a poco de todo tu alrededor.
Sugerencias
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